“Los verdaderamente eruditos, con los ojos del conocimiento divino,
ven con la misma visión a un brahmán, una vaca, un elefante, un perro (…)”,
Bhagavad Gita: Capítulo 5, Verso 18.
Cuando volví a mirar, el cachorro tenía los ojos bien abiertos. Lo podía poner en la palma de mi mano. Sus movimientos eran eléctricos, con la simpatía de quien ve al mundo por primera vez. Así conocí a Ulises gato, durante unas vacaciones en Misiones. Ahora tiene nueve años. Vivimos juntos desde hace casi una década. Comparto mi vida con él. Es casi lo primero que veo al despertar, tumbado a mi lado, en la cama, el día se abre con sus ojos verdes y grandes. No imagino comenzar la jornada de otra manera. No concibo que mi día no tenga sus patitas, sus bigotes, su pelaje atigrado.
Les llaman mascotas o animales de compañía, me gusta llamarles hermanos. En esta clasificación están contenidos gatos, perros, peces de agua dulce, ciertos mamíferos pequeños, ciertas aves y ciertos reptiles y anfibios.
Durante la Revolución Neolítica acaecida alrededor del 9000 antes de Cristo, el ser humano comenzó a darse cuenta de que algunos animales, los perros, podían considerarse animales compañeros en la caza. Para el año 3500 a.C. se comienza a domesticar a los gatos. Durante los siglos XVII y XVIII vivir con un animal de compañía era sinónimo de riqueza, clase y estatus. Ya en el siglo XIX aumenta el número de familias que adoptan o compran, despertando en nuevas necesidades que los mercados cubren, por demanda. Es decir, no sólo aumenta el número de animales de compañía sino también la oferta de prácticas y objetos destinados a los mismos. Incluso aumentó el secuestro de animales para pedir rescate. Clase alta y clase media compartían la capacidad de tenencia pues indicaban que se era suficiente y respetable. Aunque, claramente, la clase alta se movía a partir del pedigrí, es decir, el documento que avala que el perro es puro en su raza, con un mínimo de tres generaciones de antepasados.
En el mundo habitan 564,5 millones de gatos y 256 millones de perros. En Argentina, ocho de diez familias viven al menos con un animal. 81% con perros, 52% con gatos, 7% ilegalmente con tortugas, 5% aves, 4% peces, 2% hámsters. Convirtiendo a la Argentina en el país con mayor número de animales de compañía del globo, con un 78%.
Prolongar la cantidad y calidad de la vida de nuestros hermanos animales implica: chequeos médicos regulares; atención a pulgas y garrapatas; castración en los casos que se requiera; cuidados en dientes; juego; dieta balanceada -evitar el sobrepeso-; ejercicio.
Según la empresa KANTAR, que se ocupa de estudios e investigación de mercados, los perros llevan delantera frente a los gatos, que vendrían segundos. 80% de perros frente al 53% de gatos. Indicando que estos últimos están aumentando su número.
Responsabilidad y esfuerzo. Piedras angulares para la convivencia con nuestros hermanos animales. Ver en los ojos de su divinidad y actuar en consecuencia. Está comprobado que los animales de compañía impactan positivamente en la salud. Una suerte de antidepresivo natural. Acariciarlos libera oxitocina, la hormona del bienestar, a la vez que disminuye los niveles de cortisol, la hormona del estrés. El contacto también incide en la serotonina y la dopamina, los neurotransmisores de la felicidad y el bienestar. La autoestima aumenta al igual que la confianza. El vínculo con un hermano animal alienta el bienestar emocional.
6 millones de perros y gatos viven en la calle, informa el Colegio de Veterinarios de la Provincia de Buenos Aires. 6 millones. Deambulando por Buenos Aires, terminando su corta vida de la misma forma en que vivieron, con frío, con hambre, en peligro y a veces, en soledad, violencia. Desde el lema: “adoptá, no compres” se incentiva la adopción de los perros y gatos en abandono.
Ulises gato me mira. El mundo es este momento. Es su sigilo, su elegancia, su ternura. Es el enseñarme sobre la dulzura y el desapego. A diario me enseña algo nuevo. Él es mi compañero. Veo en los ojos de su divinidad y me siento una con lo que me rodea. Gracias, Ulises gato. Te amo.
Referencias
Wikipedia
culturarecreacionydeporte.gov.co
Ámbito Financiero
informeoperadores.com.ar