Meditación

Alas y raíces
en el centro
cuando me encuentro
dentro y fuera de mí.





En el Mundo de las Maravillas

Llueven hojas amarillas. Cada tanto un panadero entre mis manos, pido mi deseo, ruego que vuele alto. Como la bandada de palomas, dibujan círculos y luego encuentran su refugio. Hoy un hombre me dijo: se te cayó la hoja. Lo miré y agradecí, le di otra de mis hojas, como un tesoro escondido en la profundidad. Sonrió. Pensé: dulce humanidad. Una pequeña planta creciendo entre baldosas. Eso es valentía. Un bebé besado por su madre. Un vecino me cuenta de la milonga a la que asiste, con bastón, con emoción. En las nubes descubrí un dragón. Conocí palmeras que no les importa el otoño. Árboles añejos. No necesito seguir al conejo, con sólo abrir los ojos me alcanza. Dios tiene muchas caras.